jueves

POLÍTICOS Y EDUCACIÓN (PARA LA CIUDADANÍA)

Sigue la gresca tras la sentencia que comentaba ayer y parece que el Partido Popular sigue apoyando a los objetores. Ya he comentado aquí que los padres tienen derecho a orientar la educación moral de sus hijos pero, ¿dónde está el límite?

¿Incluimos o excluimos la educación sexual, la explicación de la homosexualidad o la igualdad entre sexos? Parece que lo sensato es que nuestros chavales reciban algún tipo de iniciación hacia conceptos como igualdad, convivencia, ideales de justicia, libertad de opciones sexuales, libertad de expresión... Es más, no estoy seguro que en muchas de las casas de los que se oponen a la dichosa asignatura se enseñen la mayoría de los conceptos que he mencionado.

Luego está algo que ya apunté ayer ¿puede un padre impedir que le expliquen a su hijo la teoría de la evolución de Darwin porque es creacionista? ¿o que le expliquen el comunismo o el fascismo en historia?; como ya dije: ¿puede un musulmán impedir que le expliquen La Reconquista a su hijo?

La solución, como casi siempre, es facil: Un pacto de estado por la educación, donde los principales partidos políticos se pongan de acuerdo en el modelo de educación y en los contenidos que deben impartirse ¿Si consiguieron ponerse de acuerdo en la Constitución, porque no en un tema como el de la educación? La respuesta es clara: no interesa. A los políticos la división les sale rentable, porque la unión les resta poder a los políticos como grupo. Sólo una situación crítica como la Transición pudo dar lugar a consensos, que desgraciadamente hemos perdido para siempre.

miércoles

CULTURA PROGRE

Estoy escuchando la COPE para enterarme del argumentario que van a usar ante la sentencia que impide la objeción de conciencia en la asignatura de Educación para la Ciudadanía y me encuentro con este corte:




Me he quedado flipado, evidentemente. He curioseado por la web: y me encuentro con lo esperado: Losantos, Vidal, Pío Moa, Aznar y el resto de los grandes pensadores que tenemos el honor de poseer en España. Lo curioso del caso es que un equipo de asesores son los que seleccionan los libros que las señoras con pieles y misa de 12 compran para que tengan "la certeza de que son buenos libros con buenas ideas". Se les ha colado algún izquierdista, pero supongo que habrán obtenido el nihil obstat de esos asesores misteriosos.

Los conservadores de España han conseguido (y es mérito de Losantos y acólitos) una cosa interesante: se han quitado la careta y la vergüenza de ser fachas y ahora hacen gala de ello. Ésto, que debería avergonzar, ha sido reforzado por todos estos libros-argumentario para lavar sus conciencias: "¿Por qué ya no soy de izquierdas?", "Los complejos de la derecha" y títulos similares, por no hablar del revisionismo histórico de la Guerra Civil de los pseudohistoriadores de cabecera, que han conseguido que ser franquista sea hasta guay.

Sin embargo, cometen el error de etiquetar a la cultura. Contraponen a los escritores "de bien" con algo que llaman cultura progre, una especie de amalgama de personajes e ideas representada por Ramoncín, Pedro Zerolo, Lucía Etxeberría, la ministra miembra de igualdad y los llamados titiriteros con Pilar Bardem a la cabeza.

Y es un error producto del clasismo propio del facha, que cree que el "progre" es, de natural, tonto. Los progres no saben distinguir lo que de verdad es cultura de lo que es propaganda o circo. Ya pueden haber ganado un Oscar (Almodovar, Bardem) o un Nobel (Saramago), que da igual.

Pues no, señores fachas: La cultura no tiene apellidos. La buena literatura, la buena música o el buen cine es patrimonio de todos (suyo también). Disfruten sin prejuicios del rock y de la ópera, de una buena película o del teatro clásico. Y como diría el bus "deje de preocuparse y disfrute de la vida".

Por cierto, un portavoz de padres ha dicho que ahora actuarán directamente contra los profesores o los libros que expliquen materia que "desvíe moralmente a sus hijos". Impresionante. ¿Qué diría Fedeguico si un padre de un niño moro denuncia a un profesor por explicar La Reconquista en clase de historia?.

lunes

BOCAS

Me he dado cuenta de que hablo demasiado. Y por eso la cago casi siempre. Las personas tendemos a simplificar el mensaje de nuestro interlocutor para su mejor etiquetado y archivo. Buscamos señales verbales y paraverbales que nos muestren si el tipo con el que hablamos es facha o progre, machista o feminista, religioso o ateo, tonto o listo. Pese a mi esfuerzo por matizar opiniones, poner ejemplos o especificar que se trata de opiniones basadas en experiencias propias y, por tanto, subjetivas; siempre me queda la sensación de haber fracasado al expresar la idea que tengo sobre un determinado tema.

Desde hace un par de lustros se nos bombardea con dos patrañas convertidas en títulos de libro de autoayuda: Asertividad y empatía. La primera habla del derecho a expresar libremente pensamientos y sentimientos de manera honesta. La segunda nos pide cierta capacidad para sentir y comprender las emociones ajenas. Una mierda para las dos.

sábado

ACENTO DE CHISTE

De nuevo un político de la comunidad catalana se chotea de la España profunda:
Oir aquí

"Tiene un acento que parece un chiste,(...) si no estás avezado en hablar en andaluz normalmente pues te cuesta"

Da igual las siglas que covijan a quien lo pronuncia, ya he comentado aquí que no se trata de ideologías, sino clasismo. Y es que a fuerza de repetirnos el puto "hecho diferencial", hemos acabado todos cayendo en la trampa; porque no se trata de otra cosa:

Un hecho diferencial no hace especiales a vascos o catalanes del resto de las comunidades españolas; porque tan diferente es un catalán de un andaluz que un andaluz de un catalán; es decir, ese hecho diferencial es, en todo caso, mérito de ambos.

Pero, claro, el valor de ese factor diferenciador se lo otorgan aquellos que se creen superiores sustentándolo en la falacia de que hay una manera de ser general y una manera de ser diferencial.

Mi hecho diferencial (piensan) me hace mejor que los otros y, por lo tanto, me arroja derechos que esos otros "normales" no tienen.

jueves

COSAS DEL TIEMPO Y DEL CALENDARIO


Estrenamos año y todos, además de los formular los consabidos nuevos y buenos propósitos, colgamos un nuevo almanaque en la pared y estrenamos recambio en la agenda. Medir y controlar el tiempo forma parte de nuestra vida desde siempre. Os propongo un recorrido por los calendarios y las mediciones del tiempo y alguna que otra curiosidad. Empezamos:

MEDIR EL TIEMPO

Sin otro medio que el cielo, podemos medir el tiempo a través de la luna (ciclos de 28 días) o el sol (ciclo de 365 días y 1/4).

CALENDARIOS

Los egipcios:

Dada la necesidad de predecir con exactitud el momento del inicio de la crecida del Nilo (periodicidad anual) fueron los primeros en usar el calendario solar hace unos 6.000 años. fueron, por tanto, los primeros en dividir el año en 365 días y empezaban el año el 1 de marzo. Tenía 12 meses de 30 días y 5 días adicionales.

Los romanos:

Los pueblos romanos primitivos tenían diferentes calendarios lunares y todavía no contaban las semanas. Acordaron un calendario de 304 días distribuidos en 10 meses (6 meses de 30 días y 4 de 31 días). El año empezaba en marzo (martius), en honor al dios de la guerra Marte ya que era el primer mes de primavera momento en el cual se decidían las campañas militares del año. Con este sistema, evidentemente, se producían desajustes que se fueron subsanadas en el 46 a.C bajo mandato de Julio Cesar. Se acordó que todos los años tuvieran 365 días, y cada cuatro años se contarían 366 y se llamaran años bisiestos. El origen del nombre se debe a que el último día del año en aquella fecha era el 23 de febrero (llamado sexto calendas martii). Como se repetía ese día dos veces, al día adicional (el 366) se le llamaba bis-sexto calendas.

Los musulmanes y los judíos:

Los musulmanes comienzan a contar el tiempo el 16 de Julio del año 622, que es el primer día de su año 1 y tienen un calendario lunar, diez dias mas pequeño que el nuestro, para ellos el año 2000 de nuestra era fué el 1420 de la era musulmana.

Tambien los judios tienen un calendario lunar y lo comienzan a contar desde el 7 de octubre del 3761 A. C; para ellos el día de la creación del universo.

EL FAMOSO AÑO 2000

Espero que a estas alturas todos tengais claro que fué el último año del siglo XX. Si atendemos a la historia, el año 2000 fué el 2775 de las olimpiadas de los antíguos griegos, el 2753 de la fundación de roma -calendario romano-, el 2660 de la era japonesa...

AÑO NUEVO:

En la antigua Roma, el año empezaba en primavera, el 1 de marzo, pero en el año 153 los cónsules empezaron a ser nombrados el 1 de enero por asuntos políticos, y se consideró que el año civil empezaba ese día.

CÁLCULO DE LA SEMANA SANTA:

Efectivamente, no hay ni un puñetero puente hasta Semana Santa. ¿Cómo se calcula cuando cae? Pues depende de cuando se produzca la primera luna llena del equinocio de primavera. El domingo de pascua (o de resurrección) es el domingo inmediatamente siguiente a este fenómeno. Es decir, el equinocio (duración del día igual a la de la noche) de primavera se produce el 20 de marzo. Desde ese momento se vé cuando es la siguiente luna llena. El siguiente domingo desde esa luna llena es el domingo de Pascua. Y 40 días antes de este domingo comienza la cuaresma (miércoles de ceniza, carnavales, disfraces, ya sabeis...).

ALGUNA CURIOSIDAD DE TRIVIAL PURSUIT:

Idus de marzo:

Los idus eran días de buenos augurios que tenían lugar el día 15 de marzo, mayo, julio y octubre y el día 13 el resto de los meses en los tiempos de los romanos. La fecha es famosa porque Julio César fue asesinado en los idus de marzo (es decir, el 15 de marzo) del año 44 a. C. Según el escritor griego Plutarco, César había sido advertido del peligro, pero había desestimado las advertencias. Shakespeare en su obra Julio César en 1599 los citaba al escribir la famosa frase: "¡Cuídate de los idus de marzo!".

Días de la semana:

Fueron implantados hacia el siglo III d.C. No obstante, hasta bien entrada la Edad Moderna, la manera de referirse a un día concreto era aludiendo al santo que se conmemoraba. Así, por ejemplo, era muy común encontrar expresiones como "nos casamos el día de San Juan".

Es curioso que los días de diario se formulan en plural (Lunes, Martes…) y los festivos en singular (sabado y domingo).

LA VIDA DEL PERRO:

21 años es el equivalente al primer año de un perro. Cada año posterior equivale a 4. Me voy a tirar en el sofá como un perro, que ya estoy cansado de escribir. ¡Hasta pronto!